sábado, 9 de abril de 2011

+Me suena tu cara...
-¿Mi cara? ¿De que?
+No se, tal vez seas tú el príncipe que todas las noches aborda mis sueños.
-¿Y no te gustaría que hiciéramos realidad esos sueños?
+Me encantaría, pero...
-¿Pero que?
+Mira que fácilmente has aparecido en mi vida, seguramente igual de

fácilmente te iras...
-No princesa, te prometo que estaré a tu lado el resto de mis días.

No hay comentarios:

Publicar un comentario